Este verano, o mejor dicho lo que llevamos de él, está siendo una caja de sorpresas y eso que todavía no ha terminado.
Uno, entre los años de pandemia y que ya venia un poco oxidado, esta redescubriendo muchas cosas con las salidas de ocio y tiempo libre.
Hay cosas que no se pueden contar, o mejor dicho no se deben contar. "Se dice el pecado pero no el pecador", incluso a veces "el pecado que va con la penitencia" tampoco.
El caso es que, como espectador de lujo o mejor dicho como persona implicada de refilón, he sido participe de actitudes y comportamientos que no había visto nunca y eso que "tengo mucha mili hecha" y "más horas que un reloj" en lo que ha salidas nocturnas se refiere.
Quizás es que, como suelo decir últimamente "estoy descatalogado" y hay ciertas cosas que mis principios no ven bien.
"Cada uno hace de su capa un sayo" y puede hacer con su vida lo que quiera, allá ellos, pero yo procuro establecer ciertas líneas rojas que rigen mi conducta.
En esta vida no todo vale.
Así que, Jorge, "calladito estás más guapo" y "hasta aquí puedo leer" que decía Mayra Gómez Kemp en el "Un, dos, tres".
Seguiremos aprendiendo y teniendo cada día si cabe, las cosas mas claras. Siendo fiel a un código de conducta y sin olvidar que por muy desesperado/a que estés por encontrar pareja "hay cosas que no son de recibo".
Tarde o temprano conocerás, sino la conoces ya, a la persona que te quite el sueño.