Últimamente y por los motivos que todos conocemos se habla mucho de la salud mental. Siempre ha sido importante aunque muchos no se dieran cuenta y no le dieran importancia.
Estar en paz con uno mismo, sentirse feliz, es una de las piedras angulares que hacen que nuestra vida tenga sentido.
Estos últimos años el estrés de la situación vivida ha hecho que los momentos de felicidad, en gran parte, brillaran por su ausencia lo que ha repercutido en nuestra salud no solo física sino también mental.
Para lidiar con esta situación se ha hecho imprescindible buscar momentos para salirse de la rutina diaria y disfrutar del aire libre acompañados por la familia, amigos o pareja.
Esos pequeños momentos de felicidad han servido para "cargarnos las pilas" y oxigenarnos". Como ya escribí hace mucho tiempo: "compartir nos hace mejores" pero sobre todo felices.
No quiero decir que la gente que está sola no pueda ser feliz pero; hablar con otras personas, compartir momentos, vivencias y experiencias enriquecen nuestra vida y nos ayudan en el día a día. La especie humana, es una especie que por lo general está hecha para vivir en sociedad.
Así que, disfrutar de los pequeños momentos que nos ofrece la vida con alguien se hace esencial y sanador.
Noel Clarasó: "La felicidad se parece a las corbatas: cada uno escoge el color de la suya".
Ch. Friedrich Hebbel: "Un prisionero es un predicador de la libertad".
Jorge: "Lo importante es lo que nos hace feliz".
Jorge: "Los momentos especiales los hacen la gente con la que los compartes".