sábado, 24 de mayo de 2025

Ya metidos en el ajo.

 Sobre este tema si mal no recuerdo creo que a lo largo de los casi quince años que llevo escribiendo he escrito un par de veces con diferentes enfoques y este no va a ser menos.

Ayer por casualidad entré en un video de Instagram, si lo reconozco, piqué. 

El caso es que era una adaptación de un baile con una canción dedicada o mejor dicho escrita por algún maestro catalán sobre todo el trabajo que hacemos y lo poco reconocidos que estamos.

"Ya metidos en el ajo" entré a ver lo que en el chat se comentaba y claro está, comenzó a hervirme la sangre y me lie a contestar.

Ufff, ¿Tan mal está la sociedad? , ¿Tan envidiosos y cínicos son algunos?

El caso es que me enzarcé en alguna conversación y al final decidí salirme de ahí por no decir más verdades a cuatro o más indocumentados.

Que si cobramos mucho, que si tenemos muchas vacaciones, que si no te gusta lo que haces deja tu trabajo.

Todo esto vino a corroborar lo que ya sabía, la falta de comprensión lectora, envidia y la incapacidad de algunos padres y abuelos de asumir que la educación empieza en casa y que cuando un padre o madre o quien sea no respeta a un profesor esta transmitiendo a sus hijos eso mismo.

"La ignorancia es muy atrevida" y por más que quería hacerles ver que hoy en día en las aulas tenemos muchos niños que precisan de una atención especializada e individualizada eran incapaces de verlo y es que ya se sabe: "Lavar la cabeza al burro es perder el tiempo y el jabón".

En fin, "tuve que poner los pies en polvorosa" porque visto lo visto, hay gente que no ha pisado un colegio ni para las reuniones de los maestros para hablar de sus hijos, y así les irá, otros se pasan el día dentro para protestar de todo.

Cuando sean mayores se darán cuenta entre otras cosas que decir "NO" no es amargarle la vida al niño, es prepararle para no ser un adulto frustrado como lo son ellos mismos.

Aquí lo dejo porque podría estar escribiendo horas y horas y no acabaría. Solo por ultimo diré una de las perlas de un iluminado. ¿Estáis preparados para ser profesores? ; respuesta mía: nosotros nos reciclamos y los padres...

Reflexión : solo desde la coordinación y el respeto mutuo podremos avanzar para que los niños de hoy no sean adultos frustrados del futuro. En las escuelas lo vemos a diario, algunos padres siguen sin querer verlo encubriendo y justificando todas las fechorías de sus hijos "echando la culpa al empedrado" y no mirándose el ombligo. 


sábado, 10 de mayo de 2025

Epístolas.

 Bueno, creo que no es necesario que le recuerde a nadie lo que es una epístola porque os acordareis aquellos que estudiábamos religión o íbamos a misa de aquello de "Epístola a los Efesios" entre otras.

En fin, queda claro que una epístola es una carta. Hoy en día para la gente joven es un termino que les suena a chino y sino lo buscan el la Wikipedia "no tienen ni flores".

Os preguntareis porque saco este tema a colación, pues resulta que el otro día me puse a pensar (cosa rara en mi) y me di cuanta que hay cosas que se están perdiendo ante la inmediatez de las nuevas tecnologías. Con ellas hemos ganado mucho pero hemos perdido otro tanto.

Recuerdo la emoción de ir al buzón a ver si habías recibido una carta de un familiar, una amiga , incluso nos gustaba abrir el buzón "por ver que se cocía ahí dentro". Hoy no nos acercamos al buzón casi ni por equivocación.

Bueno, a lo que iba que me estoy desviando de lo que realmente quería contar.

Otra cosa que hacíamos y algunos seguimos haciendo, aunque no todos, es llevar un diario en el que anotamos las cosas importantes o del día a día para acordarnos o simplemente porque necesitamos decírselo a "un amigo/a imaginario/a. Unos lo hacen en el blog de notas de su Smartphone y otros en el típico diario; el caso es "liberar espacio en el disco duro" o simplemente la necesidad de decirnos cosas que de otra manera no hacemos.

Hay cartas que quedan el el olvido esperando una segunda oportunidad de ser mandadas, otras de ser borradas u otras una segunda lectura para llevarnos a su tiempo y recordarnos que todo lo que se escribe tiene un destinatario un mensaje y una intención.

No hay que esperar la oportunidad de hacerlo porque ¿Quién sabe?, igual dentro de unos años aparece en el cajón del olvido y... solo será una hoja que quizás nadie entienda.

Jorge: "No perdáis la costumbre de escribir ; ayuda al alma y libera el corazón".