Muchas veces "te asaltan las dudas" cuando tienes que tomar una decisión sobre tu futuro, ¿Y a quien no?
Cuando surge la necesidad de una reflexión profunda a la hora de elegir que camino tomar; puedes tenerlo "más claro que el agua" o "estar más perdido que un pulpo en un garaje".
No todas las decisiones a tomar exigen una reflexión, algunas se toman desde la impulsividad y "en el calor del momento" o "fragor de la batalla". En Valencia decimos "Pensat i fet" cuando actuamos sin pensar en las consecuencias, sabiéndolas pero sin que te importe mucho o asumiendo todas. "Au, a fer la mà".
Ni en unas ni en otras se tiene cien por cien de infalibilidad. Muchas veces "estamos más perdidos que Adán el día de la madre" o "más perdidos que la madre de Marco" y de perdidos nos tiramos al río o no en función del "arrojo" de cada persona.
Incluso a veces, una vez toma la decisión aun nos asaltan las dudas, ¿Habré hecho lo correcto? ¿Me saldrá bien?, es como todo, hasta que no pasa el tiempo no se puede saber. "A cojones vistos macho seguro".
Cada decisión requiere "sus tiempos" y dependerá de la capacidad de abstracción que tengamos y la claridad de ideas o lo que nos afecte.
Otro factor a tener en cuenta que no tiene nada que ver con la reflexión es la suerte. "alea jacta est". Pues eso, "Suerte valor y al toro" y "que Dios reparta suerte". Es importante tener una pizca de suerte para que "los planes salgan bien" como decía Hannibal Smith. Aun así, la reflexión en su justa medida nunca esta de más.
Jorge: "Pensar está bien, pensar mucho da dolor de cabeza".
Jorge: "Una manera de evitar el estrés es la reflexión diaria".
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